Título: | EL GRAN HOTEL BUDAPEST | |
Tit. Orig.: |
THE GRAND BUDAPEST HOTEL | |
Nacionalidad: | EE.UU., ALEMANIA, 2014 | |
Dirección: | WES ANDERSON | |
Guión: |
WES ANDERSON. Basado en una historia de WES ANDERSON, HUGO GUINNESS. Inspirados en las obras de STEFAN ZWEIG |
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Fotografía: |
ROBERT D. YEOMAN |
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Música |
ALEXANDRE DESPLAT |
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Interpretes: |
RALPH FIENNES, TONY REVOLORI, F. MURRAY ABRAHAM, JUDE LAW, SAOIRSE RONAN, MATHIEU AMALRIC, ADRIEN BRODY, WILLEM DAFOE, JEFF GOLDBLUM, EDWARD NORTON, HARVEY KEITEL, BILL MURRAY, TILDA SWINTON, TOM WILKINSON, LÉA SEYDOUX, JASON SCHWARTZMAN |
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Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 12 AÑOS | |
Duración: |
100 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
Wes Anderson, director excéntrico, de espíritu indie, protegido por cierto sector de la crítica, en el que no nos encontramos, tiene un estilo muy particular en su cine que le hace inconfundible, aunque no a todo el mundo le gusta.
Con 'El gran hotel Budapest' ganó el Gran Premio del Jurado Oso de plata en el Festival de cine de Berlín 2014, en cuyo extenso reparto se encuentran los actores que son ya habituales en sus películas, entre ellos Bill Murray y Owen Wilson, aunque aquí tienen papeles episódicos, que forman parte de los empleados de este gran hotel mezclándose con los clientes, en el que se ha producido el robo de una valiosa pintura del Renacimiento.
Este es el octavo y más brillante trabajo del tejano Wes Anderson, nacido en Houston, un fresco sobre un tiempo extraño, pero a la vez divertido, que se inspira en los libros y memorias del escritor vienés Stefan Zweig, como se declara expresamente en los créditos finales, sin detenerse en una obra concreta sino rescatando su espíritu, logrando así su film más europeo.
Monsieur Gustave H., atento y educado conserje de un hotel decimonónico, amante de maduras señoras adineradas, establecimiento situado en el imaginario país alpino de Zubrowska en los años 30 del siglo XX, se ve obligado a huir en compañía de Zero Mustafa, un botones del mismo, víctima de una falsa acusación de robo y asesinato.
En su escapada recorren una vieja Europa Central de la que hace una reconstrucción muy personal, en vísperas de su peor pesadilla: la Segunda Guerra Mundial.
La historia es contada por un Zero Mustafa, ya viejo, a un escritor en los años 60 en el hall del Gran Hotel, que en su día vivió momentos gloriosos, con una clara narración y sin melodramatismo.
Anderson pinta la historia con un orden riguroso de cada uno de los planos, con la expresividad controlada de los actores y surge así la manera de hacer su cine.
Nos muestra una forma de vivir distinta, de otro tiempo.
Bajo la apariencia de una comedia nos cuenta esta especie de thriller en el que se borran los límites entre la fantasía y la visión de un tiempo pasado, se desarrolla una relación jefe y empleado que da paso a la amistad, así como una historia de amor, con su peculiar sentido del humor surrealista y forma de ver el mundo.
A pesar de ello bajo la brillante fotografía, que le da un tono de irrealidad, poco hay en el fondo más que su envoltorio de colores chillones, con panorámicas rápidas, zooms, travellings laterales, encuadres atrevidos, montaje en corto, uso de maquetas y músicas no habituales creadas por el compositor de moda Alexandre Desplat, que le dan un aire de cómic, con tipos extraños propios del mundo de Anderson con algunas referencias a los viejos maestros del cine cómico de antaño.
Dentro del extenso reparto coral de actores conocidos que incorporan a extravagantes personajes, destaca un excelente Ralph Fiennes como Monsieur Gustave y la revelación de Tony Revolori en el papel del joven Zero Mustafa, que posteriormente interpreta F. Murray Abraham de adulto, y entre los femeninos apuntar la presencia de la actriz irlandesa Saoirse Ronan como la pastelera Ágatha.
Tiene una estructura que funciona bien, con complicados movimientos de cámara y cambio de formatos de pantalla, lo que unido a los efectos digitales y los fabulosos decorados, resulta ser de lo mejor de esta cinta, que tal vez para los que no gusten del cine de Wes Anderson es no obstante de las más asequibles, logradas y divertidas de este director.