Título: | LA CABEZA ALTA | |
Tit. Orig.: |
LA TÊTE HAUTE | |
Nacionalidad: | FRANCIA, 2015 | |
Dirección: | EMMANUELLE BERCOT | |
Guión: |
EMMANUELLE BERCOT, MARCIA ROMANO |
|
Fotografía: |
GUILLAUME SCHIFFMAN |
|
Música | ÉRIC NEVEUX | |
Interpretes: |
CATHERINE DENEUVE, ROD PARADOT, BENOÏT MAGIMEL, SARA FORESTIER, ANNE SUAREZ, LUDOVIC BERTHILLOT, AURORE BROUTIN, MICHEL MASIERO |
|
Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 16 AÑOS | |
Duración: |
119 MINUTOS |
---|
Por PACO CASADO
Una semana más estamos ante una película del país vecino que nos inunda constantemente con sus producciones. En este caso se trata del título que inauguró el Festival de cine de Cannes de este año, no exento de polémica, que gira en torno a la problemática social de la educación de una juventud descarriada.
El joven Malony Ferrandot lleva entrando y saliendo del juzgado de menores desde que tenía seis años al tener una madre conflictiva, incapaz de educarlo como era necesario, al ser un chico rebelde por naturaleza, agresivo y con una rabia contenida.
Florence, una instructora de menores a punto de jubilarse y Yann, un maestro que también tuvo una infancia difícil, serán los encargados por la jueza que lleva su caso de enderezar a este joven de 15 años para intentar mejorar su conflictivo comportamiento, dedicado a robar coches y siendo violento al conducirlos, causando daños a terceros.
Más que de un delincuente se trata de un joven psicótico que se comporta de la forma menos inteligente, que añora el cariño de su madre ausente y de su hermano pequeño.
Así Malony es enviado a un estricto centro educativo donde conocerá a Tess, una chica muy especial que le mostrará la senda para cambiar.
El film recorre su comportamiento a través de sus relaciones con la jueza, los correccionales y prisiones en las que se ve metido debido a su constante mala conducta, lo que a veces se hace algo reiterativo para el espectador en un metraje al que le sobra al menos veinte minutos.
Esta quinta cinta de Emmanuelle Bercot es una mezcla de drama cargado de rabia y ternura sobre la realidad de unos jóvenes procedentes de familias disfuncionales, sin apenas educación.
Tiene una parte casi de documental sobre este joven, especie de psicópata, en torno a los esfuerzos, perseverancia que derrochan los servicios sociales franceses por reformarlo y conducirlo por el buen camino, a los que hace un homenaje a su labor para encauzar sus vidas.
Cine sobre problemática social de una Francia que por lo que vemos en esta historia posee todos los elementos apropiados para la corrección de esta clase de elementos antes de que sea peor el remedio que la enfermedad.
El guion refleja con bastante verismo la conducta del chico y la paciencia que tienen tanto la jueza como los educadores al intentar inculcarle las enseñanzas en cuyos métodos no aparece para nada la violencia, ni los castigos, sino más bien la redención a través de la comprensión, algo que debe ser muy moderno en esta clase de educación con estos chicos delincuentes, cuyo comportamiento de los educadores es demasiado buenista para la actitud incorregible del educando.
En este sentido interesa más el seguimiento de estos métodos que se hace sobre Malony que los resultados, ya que no es muy creíble el cambio radical que éste experimenta a final de la historia, tal vez en busca de una moraleja o la empatía del espectador con el protagonista algo que resulta casi imposible debido a su mala actitud.
Un reparto equilibrado con buenas interpretaciones en el que frente al joven debutante Rod Paradot, que hace un buen trabajo, se encuentran pesos pesados como Catherine Deneuve que demuestra una vez más su calidad y veteranía.