6 Marzo 2020. Atrevida Producciones rueda en Madrid, Granada, Sevilla, Francia y Alemania una cinta que homenajea al científico granadino.
Emilio Herrera fue el inventor del primer traje espacial y padre de la aeronáutica española tristemente borrado de nuestra historia.
El cine lleva a la gran pantalla el primer documental sobre la vida y obra del científico granadino Emilio Herrera, un personaje célebre, reconocido fuera de nuestras fronteras que, sin embargo, desaparece a partir de 1936, ya que su lealtad a la República le costó el exilio y que se borrara su inmenso legado. Él siguió trabajando al otro lado de los Pirineos, codeándose con la élite mundial, de ahí su amistad con Einstein o que lo quisieran fichar en la NASA. Fue tal su prestigio que llegó incluso a ser presidente del Gobierno de la República en el exilio.
En 2020 Atrevida Producciones recupera su vida y obra a través de un nuevo documental dirigido por Alberto M. Flechoso con Andrés Tovar como productor. La cinta, que cuenta con el apoyo de la Diputación de Granada, presenta un personaje desconocido, y se apoya en el mayor especialista sobre su figura, el historiador Emilio Atienza. La productora visita diferentes escenarios donde aún se conserva parte de su legado: Cuatro Vientos, INTA, Escuela de Ingenieros Aeronáuticos, etc. Y otros que son fundamentales en su trayectoria tanto en España como en Francia y Alemania.
De su famoso traje espacial, la cinta recoge la única réplica existente y ha construido en tres dimensiones su desconocido dirigible con el que pretendía unir las dos orillas del Atlántico. No es un trabajo de intervenciones y fotos en blanco y negro. La gran cantidad de imágenes de archivo integradas con las actuales, y la presencia de famosos personajes del mundo de la ciencia lo hacen más dinámico y actual.
El documental avanza por su vida y los acontecimientos que marcaron la historia que le tocó vivir: los comienzos de la aviación., la Guerra Civil, la II Guerra Mundial, el exilio, la guerra fría,… Todos hechos que marcaron su existencia y determinan lo que somos hoy.
El rodaje incluye Granada, tierra natal de Herrera; Madrid donde están sus laboratorios, parte de su legado y muchos entrevistados. Sevilla, donde Herrera quiso montar la gran terminal de Europa. París, lugar de exilio, y Alemania, donde queda mucho material científico del momento (Museo Zepelín y ESA).