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CRITICA
Por: PACO CASADO
Hay ocasiones en que se tienen todos, o casi todos, los elementos necesarios para hacer una buena película.
Pero no siempre a los hombres a los que se les encomienda esta tarea saben lograrlo con las precisas y necesarias garantías como para que funcione en todo y más amplio concepto de la palabra.
Porque un olvido o dos pueden hacer fracasar el resultado final de un film
Contamos aquí con dos de las mejores actrices de la cinematografía italiana en estos momentos.
Un buen nombre para la composición de la música como Riz Ortolani.
Un fotógrafo de prestigio como el que tiene bien ganado Dario di Palma.
Pero se olvidaron de hacer un buen guion y de encomendar su realización a un director con más experiencia e inteligencia que la que tiene Carlo di Palma.
Bueno, mejor diríamos que el guion es inexistente a pesar de haber tres responsables como Barbara Alberti, Amedeo Pagani y el propio Carlo di Palma, ya que todo parece estar encaminado únicamente a hacer lucir las virtudes interpretativas de dos estrellas como Monica Vitti y Claudia Cardinale le hace esta última el contraste al trabajo de la primera.
Si por otra parte este guion nos cuenta una historia absurda, con situaciones sin sentido, sin gracia y con algunos momentos rayanos en la necedad, la cosa no hay quien la salve de ninguna manera, y menos un director inexperto como Carlo di Palma que deja de hacer a las dos divas a sus anchas.
Ambas actrices demostraron en otras múltiples ocasiones que saben hacerlo bien y que son dignas de mejor empeño que el que se les ha encomendado en esta ocasión en el que se han visto embarcadas encarnando a dos mujeres Claudia y Miele que deciden abandonar sus mundanas vidas y emprender una aventura salvaje.
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