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CRITICA
Por: PACO CASADO
Realmente este film podía ser cualquier otro de ambien y aventura selváticos, sin necesidad de echar mano del legendario personaje de Tarzán.
Porque Tarzán ya no es el eje de estas, sus últimas aventuras, sino que su figura entra en acción en relación con otros personajes y otros escenarios.
Así, este Tarzán en coproducción que ahora nos llega, es casi un elemento secundario en una historia de americanos entremezclada con otra de la sucesión a la jefatura de una tribu indígena.
En este desarrollo argumental, Tarzán es sólo testigo en la primera mitad, para luego tomar un poco de más importancia.
El famoso personaje de Rice Burroughs, ayuda a los buenos (en este caso un chiquillo indio que aspira a la sucesión de su padre), y lo defiende de los malos, que son muchos y de todos los colores.
Cinta infantiloide, posee un buen colorido, y supone un cierto esfuerzao de producción al estar rodada en Colombia Y Florida, lo que es de agradecer en cuanto se evitan falsos decorados y se gana en hermosos paisajes.
Floja interpretación, sobre todo de Steve Hawkes, y un tono general de medianía en este film dirigido a públicos infantiles y de pocas ambiciones en lo artístico.
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