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CRITICA
Por: PACO CASADO
Gabriel Carvin es el prestigioso chef líder de la cocina francesa, que dirige su restaurante Monsieur Quelqu'n con tres estrellas, que un día le da un infarto que le pone al borde de la muerte y decide tomarse la vida con más calma.
En su reposo tras la operación de la que ha sido objeto, se le vienen al pensamiento algunos momentos de su vida anterior, entre ellos su participación en un concurso gastronómico en 1987 en el que fue derrotado por un tazón de Ramen que había creado un joven chef japonés, quedado el segundo en la clasificación.
Este recuerdo hace que se lanze a la búsqueda del sabor que ha confundido su vida desde entonces.
Deja el restaurante en manos de su hijo Jean, que la verdad es que en conocimientos de concina no le llega ni a la altura del zapato y se marcha decidio al Japón en busca del famoso chef que a esta altura es ya una persona muy mayor, como él y una vez que se presenta en su restaurante éste se niega a recibirle.
El objetivo de su viaje es que Tetsuichi Morita, que así se llama, le enseñe el secreto de aquellos fideos que se conocen como umami, cuyo sabor lo tiene grabado en la memoria, pero que desconoce cuales son los ingrediemnte es este plato. No obstante insiste hasta que por fin lo logra.
Entre tanto su hijo ha dejado también el establecimiento hostelro en manos del segundo de a bordo y se ha marchado en su búsqueda y una vez llagado a Japon hace amitad con una chica que es familiar del famoso chef.
El protagonista de esta historia es Gabriel Carvin, interpretado por el famoso y orondo actora rancés Gérad Depardieu muy a la buena mesa como lo demuestra su figura y al que parece ni importale su físico.
La historia se le ocurrió al guionista, productor y director parisino Slony Sow en una comida en un restaurante en una conversación de amigos en la que cada uno dio una versión diferente de lo que era el umami, y decidió, como el protagonista, llegar a los orígenes de la enigmática comida a base de fideos.
Tras hacer casi una docena de cortos Slony Sow debutó en la direccón de un largo con Parisiennes (2015), la historia de una escritora japonesa que se marchha a París a buscar tema para su próxima novela, siendo 'El sabor de las cosas simples' (2022) su segunda película en la que vuelve a colaborar con Gérard Depardieu que ya intervino en alguno de sus cortos.
La historia esencial no daba para mucho y se le introuce la parte de la marcha del hijo a Japón en busca del padre para completar el metraje y entonces se alarga en exceso ya que no cuenta cosas importantes como la intervención del vetarno Pierre Richard en el papel de su amigo Rufus, un criador de ostras.
Mas que una película gastronímica diríamos que es un film de viajes y sobre el envejecimiento cuando ya que está al límite de la vida.
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