Título: |
MANDARINAS | |
Tit. Orig.: |
MANDARIINID | |
Nacionalidad: |
ESTONIA, GEORGIA, 2013 | |
Dirección: |
ZAZA URUSHADZE | |
Guión: |
ZAZA URUSHADZE |
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Fotografía: |
REIN KOTOV |
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Música |
NIAZ DIASAMIDZE |
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Interpretes: |
LEMBIT ULFSAK, GIORGI NAKASHIDZE, ELMO NÜGANEN, MISHA MESKHI, RAIVO TRASS |
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Censura: |
NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 12 AÑOS | |
Duración: |
87 MINUTOS |
Por PACO CASADO
Hay ocasiones que tanto los Oscars, Globos de oro o los festivales, impulsan a una película de una cinematografía de una nación pequeña en la que apenas se hace cine y provoca que se vea en más partes del mundo al ser vendida a otros países e incluso que se descubran nuevos directores que son interesantes y que de otra manera quedarían siempre inéditos.
Así ha ocurrido con 'Mandarinas', del georgiano Zaza Urushadze, que hace el quinto título de su filmografía, que cuenta la historia de Ivo y Margus, dos ancianos amigos, estonios, que viven en la Georgia de 1992, cuando ésta se encuentra en plena guerra civil, intentando mantenerse al margen, cuyas familias han emigrado a la ciudad y viven solos en sus cercanas casas.
El primero tiene una serrería en la que fabrica las cajas en las que el segundo, que se dedica a recoger la cosecha anual de mandarinas de sus tierras, guardará la fruta.
A pesar de la contienda ellos siguen plácidamente en su pueblo.
Pero cuando encuentran a dos soldados, uno checheno y el otro georgiano, ambos malheridos, Ivo decide acogerlos en su casa para que se curen de sus heridas, haciéndoles prometer que no se matarán mientras estén en su hogar.
Es una historia sencilla pero universal, antibelicista en toda regla, sobre lo absurdo de la guerra y su parte más humana, con algunas gotas de humor negro que aligeran la tensión sobre la violencia de los momentos más dramáticos.
Es la primera producción báltica nominada al Oscar en la categoría de mejor película de habla no inglesa.
Un film que nace del dolor que produce una guerra civil a las personas y el deseo de inculcar valores como la paz y la amistad.
El director se inspiró en su abuelo para contar este relato.
Conmovedor drama con mensaje pacifista, bienintencionado, conciliador, humanista, con buen manejo de los tiempos para tan corta duración, sin renunciar a la dureza realista de la guerra y con una voluntad didáctica.
Ivo y Margus se ven envueltos en el conflicto sin quererlo en su ayuda humanitaria a unos hombres con los que nada tienen que ver, enemigos enfrentados entre los que logran incluso que se respeten y se ayuden, a pesar de sus ideologías tan distintas, tanto en cuanto a la política como en lo referente a la religión, uno musulmán, el otro católico, constituyendo todo un canto sobre la tolerancia, resultando interesante la relación que se establece entre ellos y los dos heridos.
Cinta modesta que tiene una realización interesante a la hora de su puesta en imágenes, que saca partido de lo reducido de los escenarios en los que se desarrolla, con unos movimientos de cámara apenas perceptibles que acerca a los limitados personajes de este drama, con una serena interpretación muy adecuada en cada uno de los actores, que mantienen la tensión de una historia que nos lleva hasta su incierto final.
La banda sonora tiene un tema minimalista que se repite en exceso a lo largo de la trama.
En definitiva un buen drama sobre la reconciliación de los pueblos que critica a los políticos irresponsables culpables de sus enfrentamientos.
Fue nominada a los Oscar y a los Globos de oro a la mejor película de habla no inglesa. Premiada en los festivales de Jerusalén, Bari y en los Satelites Arwards. Mejor director y premio del público en el Festival de Varsovia. Dos premios en el Festival de Tallinn y tres premios en el de Mannheim-Heidelberg.