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RITICA
Por: PACO CASADO
Cuenta la vida Stuart Long, un hombre que es fruto de un hogar desestructurado, con un hermano que murió cuando era simplemente un adolescente y cuyo padre abandonó a su madre y a él, que se lleva muy mal con ambos.
Stu, como así le llaman cariñosamente, es agnóstico, no tiene formación y la única forma que encontró de ganarse la vida fue la del cuadrilátero que, como boxeador amateur, ganó una veintena de combates y varios trofeos, hasta que un día un médico después de una pelea, le detecta una especie de cáncer en la mandíbula y le recomienda retirarse si no desea morir.
Entre tanto conoce a Carmela, una chica mexicana de la que se enamora, es una católica feliz y si no se convierte al cristianismo, no se casará con él, algo a lo que accede por amor.
Un día, tras sufrir un accidente de tráfico y estar al borde de la muerte recibe la llamada de Dios.
Este es el comienzo de la larga historia de este hombre, que existió en realidad, al que se puede ver en los créditos finales a través de varias imágenes y de un breve vídeo.
Esta película bien se puede encuadrar en ese género de film religioso que se suele hacer últimamente en los Estados Unidos en el que se desliza mucha enseñanza extraída del Evangelio y la Biblia, pero con intención de cinta más comercial con actores conocidos en la cabecera del reparto, como últimamente ocurrió con Los ojos de Tammy Faye (2021).
Es la historia real de Stuart Long un boxeador que llegó a convertirse en sacerdote lo que inspiró a innumerables personas durante su vida, desde ser un personaje casi autodestruido hasta alcanzar la redención y el perdón mediante la fe.
Es el primer largometraje que escribe y realiza la directora Rosalind Ross, pareja de Mel Gibson, que tan sólo había escrito con anterioridad los guiones de una miniserie de televisión y un corto que, al conocer esta historia real, se ha atrevido a escribir el guion y posteriormente ponerla en imágenes, algo que hace como si fuera una profesional experimentada.
Para ello cuenta con el protagonismo de Mark Walhberg, que se entusiasmó con la idea, que a lo largo de la trama podríamos decir que prácticamente hace varios papeles dentro del mismo personaje; primero del joven boxeador que termina fracasando o teniendo que retirarse; después del enamorado que se ve en la texitura de bautizarse cuando en realidad era prácticamente ateo, lo que hace por amor; en tercer lugar el convertirse en sacerdote tras la llamada divina y finalmente en el enfermo tullido que a pesar de ello no abandona su vocación.
Otro de los nombres que aparece en el reparto es el de Mel Gibson en el papel del duro padre, que no quiere ni a su propia sombra, un hombre alcohólico, de un duro carácter, que abandona a su esposa y a su hijo, que no es capaz de ayudarle hasta que por fin lo ve desvalido y casi muerto.
El tercer nombre conocido es el de un envejecido Malcolm McDowell en el personaje de Monseñor Kelly, director del seminario, que en principio se opone a admitir a Stu si no paga la matrícula entera y posteriormente a ordenarlo sacerdote porque da mala imagen al tener antecedente de varias detenciones por conducción lo que puede dar mal ejemplo a la comunidad, al que convence Stu usando palabras extraídas del Evangelio.
Los papeles femeninos recaen en Jacki Weaver como Kathleen, la sufrida madre, y la agraciada actriz mexicana Teresa Ruiz en el papel Carmen, ambas muy centradas en su labor.
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