AARON TAYLOR-JOHNSON ganó un Globo de Oro, nació en Inglaterra y comenzó a actuar con tan solo nueve años.
Taylor-Johnson, junto con su esposa, Sam Taylor-Johnson, coescribió la adaptación cinematográfica del libro de James Frey de 2003 titulado A Million Little Pieces. Sam también dirigió la película, coprotagonizada por Billy Bob Thornton, Odessa Young y Charlie Hunnam.
En 2018, Taylor-Johnson protagonizó “El rey proscrito” de David McKenzie donde encarnaba a James Douglas, junto a Chris Pine, que interpretaba a Roberto I de Escocia. Netflix estrenó la película a escala mundial y se estrenó en el Festival Internacional de Cine de Toronto y en el Festival de Cine de Londres en 2018.
En 2017, Taylor-Johnson protagonizó el thriller "The Wall" de Doug Liman, interpretando a un francotirador estadounidense en un juego del gato y el ratón con un francotirador iraquí.
En 2016, protagonizó "Animales nocturnos" de Tom Ford, junto a Amy Adams y Jake Gyllenhaal. Su trabajo en esta película dramática, una adaptación de la novela de 1993 de Austin Wright Tony and Susan, le valió a Taylor-Johnson un Globo de Oro, así como una nominación al BAFTA y tres nominaciones al premio de la Asociación de Críticos de Cine al Mejor Actor de Reparto. La película se proyectó en el Festival de Cine de Venecia de 2016, donde ganó el Gran Premio del Jurado; en el Festival internacional de Cine de Toronto de 2016; y en el BFI London Film Festival de 2016; además, obtuvo varias nominaciones a diversos premios en la temporada 2016-2017.
En 2015, Taylor-Johnson se unió a los actores Robert Downey Jr., Chris Evans, Scarlett Johansson, Chris Hemsworth, Samuel L. Jackson y Mark Ruffalo que retomaban sus papeles en la segunda entrega de la franquicia de Los Vengadores, "Vengadores: La era de Ultrón”. Taylor-Johnson y Elizabeth Olsen interpretaron al dúo hermano-hermana Quicksilver y Scarlet Witch. La secuela recaudó más de 1.000 millones de dólares en las taquillas de todo el mundo.
En 2014, Taylor-Johnson protagonizó la aventura de acción "Godzilla", junto a Bryan Cranston y Elizabeth Olsen. La película, dirigida por Gareth Edwards, recaudó más de 200 millones de dólares en Estados Unidos.
En 2012 interpretó al Conde Vronsky en la adaptación de “Anna Karenina”, dirigida por Joe Wright. La película, una versión innovadora de la novela clásica, se estrenó en el Festival Internacional de Cine de Toronto de 2012. A principios de ese año, Taylor-Johnson actuó junto a Taylor Kitsch y Blake Lively en “Salvajes” de Oliver Stone, con un reparto estelar, que incluía a Salma Hayek, John Travolta y Benicio Del Toro.
En 2010, Taylor-Johnson fue el protagonista de la película de culto de enorme éxito “Kick-Ass: Listo para machacar” de Dave Lizewski, junto a Nicolas Cage, Chloe Grace Moretz y Christopher Mintz-Plasse. La adaptación de Matthew Vaughn del cómic de Mark Millar ganó el Premio a la Mejor Película Británica en los Empire Awards. En agosto de 2013, Taylor-Johnson retomó su papel en la esperada secuela “Kick-Ass 2: Con un par”.
En 2009, Taylor-Johnson trabajó en “Nowhere Boy” de Sam Taylor-Woods, en donde interpretó a John Lennon en sus turbulentos años de adolescencia. Su magnífica interpretación le valió varias nominaciones, como la del Círculo de Críticos de Londres al Mejor Joven Intérprete Británico del Año, un Premio Cine Independiente Británico al Mejor Actor y un Premio Empire al Mejor Actor Debutante, que ganó. En 2010, Screen International le nombró una de sus Stars of Tomorrow.
Sus papeles anteriores incluyen una versión más joven del personaje de Edward Norton en la película nominada al Oscar "El ilusionista”; “Los rebeldes de Shanghai”, junto a Jackie Chan y Owen Wilson; “El príncipe de los ladrones”, con Caroline Goodall y Jasper Harris; la película independiente británica "Dummy”; "Mi gato Angus, el primer morreo y el plasta de mi padre” de Gurinder Chadha; y "El mejor", junto a Carey Mulligan y Pierce Brosnan. También ha aparecido en numerosas series de televisión de gran popularidad en el Reino Unido como “Feather Boy”, “Family Business”, “Nearly Famous” y “Talk to Me”.
En 2017, Taylor-Johnson fue contratado por la Maison Givenchy donde representó la fragancia Gentleman de la marca. La campaña comercial y en prensa de la fragancia, dirigida por el artista Sam Taylor-Johnson, simboliza la elegancia clásica de Givenchy.