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CRITICA
Por: PACO CASADO
Llegada la proximidad de las fiestas navideñas, siempre hay alguna película que refleje en sus imágenes esa entrañable celebración y un año más no podía faltar el título en cuestión, esta vez representado por la secuela de 'Malas madres' (2016) que cuenta cómo las siempre desbordadas y sobrecargadas de trabajo Amy, Kiki y Carla, se enfrentan a uno de los mayores retos de una madre: los preparativos de Navidad ante lo que tratan de hacerlos perfectos pero llega un momento en el que también hartas intentan rebelarse.
Las madres preparan las fiestas para sus respectivas familias, cuando de improviso se les presentan sus madres dispuestas a pasar la Navidad, teniendo que cuidar también de ellas.
Eso no quita para en algún momento desesperado traten de echar las patas por alto revelándose en una peripecia que terminará redefiniendo las fiestas navideñas en familia de una manera diferente a la tradicional.
Esta continuación vuelve a contar con las mismas actrices que la anterior, Mila Kunis, Kristen Bell y Kathryn Bell, a las que se les añaden las respectivas progenitoras incorporadas por Christine Baranski, Cheryl Hines y Susan Sarandon, para seguir con las aventuras de estas tres madres en una comedia del tipo que suele hacer últimamente el cine americano.
En las recién llegadas madres hay de tres tipos, Ruth, la ricachona que se apropia del hogar de la hija, sin respetar que no está en su casa, que se pasa de confianza organizando fiestas y cambiando la decoración por su cuenta, guste o no a los demás, con la excusa de poner por delante a los nietos; Isis es una aprovechada que llega para sacarle dinero a la hija y una tercera, Sandy, en la que las relaciones entre ellas aparentan ser buenas pero en realidad se muestran un tanto distantes, lo que trata de enmendar la madre en cuestión intentando acercarse más a ella comprando una casa cercana, cuando en realidad la hija lo que quiere es que la deje en paz, prueba de ello es que la echa de casa en un momento determinado.
La verdad es que la imagen que se da de las madres americanas en este caso no es la que las deja mejor paradas y sabiendo que está escrita por los guionistas de 'Resacón en Las Vegas' (2009) es fácil de imaginar lo que se puede encontrar.
Al final las madres de las madres terminarán por darse cuenta de que deben dejar en libertad a sus hijas, no ser acaparadoras y que cada cual se monte la vida como crea conveniente, terminando por aflorar finalmente los sentimientos.
El film tiene un esquema similar al de 'Dos padres por desigual' (2017), esta vez en versión femenina, que apenas tiene comicidad, con situaciones sin gracia, con un reparto coral femenino que se reparte el protagonismo, con diálogos un tanto deslenguados, sin mayor interés en la peripecia que se nos cuenta que apenas hace sonreír al espectador, y en la que las mujeres arrinconan a los hombres que se muestran aquí más débiles, siendo ellas las que se llevan el protagonismo en todo momento en esta comedia gamberra y deslenguada, políticamente incorrecta.
No es necesario haber sufrido la primera entrega para ver ésta.
Finalmente la suma de madres no supone una mayor comicidad.
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