Título: |
THE INTERNATIONAL, DINERO EN LA SOMBRA |
Título original: |
THE INTERNATIONAL |
Nacionalidad: |
ALEMANIA, INGLATERRA, EE.UU de 2008 |
Dirección: | TOM TYKWER |
Guión: | ERIC WARREN SINGER |
Fotografía: |
FRANK GRIEBE |
Música: |
TOM TYKWER |
Interpretes: |
CLIVE OWEN, NAOMI WATTS, ARMIN MUELLER-STHAL, BRIAN F. O'BYRNE, ULRICH THOMSEN y ALESSANDRO FABRIZI |
Censura: |
NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 13 AÑOS |
Duración: |
117 MINUTOS |
Por PACO CASADO
Tras inaugurar el Festival de Cine de Berlín 2008, se estrena ahora este thriller político acerca de la corrupción de los bancos que especulan con la venta de armas de fuego y destrucción lo que origina la deuda de los países que caen en sus manos y a los que así pueden manipular más fácilmente.
En todo ello hay políticos corruptos, mafiosos, especuladores, asesinos a sueldo, policías inmorales que no cumplen con su deber frente a los dos protagonistas de este relato, que está inspirado en hechos reales.
Louis Salinger, agente de la Interpol, y Eleanor Whitman, ayudante del Fiscal del Distrito de Manhattan, tratan de descubrir esta trama internacional.
La película denuncia las oscuras actividades del ficticio banco de Luxemburgo IBBC que blanquea el dinero de militares golpistas y bandas terroristas, ganando beneficio con lo que estas armas destruyen y endeudando a los gobiernos para tenerlos comiendo en sus manos. Se crean así unos nuevos villanos para el cine: los bancos.
El guión, que tiene un arranque interesante, busca más el suspense de estas manipulaciones que la acción, que prácticamente ocurre en los metros finales, tras el espectacular y excesivo tiroteo en el Museo Guggenheim, exponiendo de forma contundente la intriga a ritmo de thriller.
Tom Tykwer aborda aquí el cine de género de una forma artesanal, con buen pulso, sabiendo crear el clima de corrupción que apunta la trama, en la que se mezclan a partes iguales el espectáculo, con el suspense y la apasionante intriga política, logrando equilibrar debidamente los ingredientes que conforman un problema universal: el expolio progresivo de las funciones estatales y las multinacionales sin escrúpulos.
Clive Owen incorpora con convicción su sentido de la justicia e integridad moral, pasando más desapercibido el trabajo de Naomi Watts. Excelente y sobrio el veterano Armin Mueller-Stahl.
Cine comercial bien hecho y expuesto de forma interesante.