Título: |
MAS ALLA DE LA DUDA |
Título original: |
BEYOND A REASONABLE DOUBT |
Nacionalidad: |
EE.UU de 2008 |
Dirección: | PETER HYAMS |
Guión: | PETER HYAMS, basado en el guiòn escrito por DOUGLAS MORROW |
Fotografía: |
PETER HYAMS |
Música: |
DAVID SHIRE |
Interpretes: |
JESSE METCALFE, AMBER TAMBLYN, MICHAEL DOUGLAS, JOEL MOORE, ORLANDO JONES, SEWELL WHITNEY y MEGAN BROWN |
Censura: |
NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 13 AÑOS |
Duración: |
104 MINUTOS |
Por PACO CASADO
El director alemán Fritz Lang cuando se trasladó a Estados Unidos hizo algunas películas en las que se preocupaba por temas que afectaban a la sociedad de aquel país como Furia, Solo se vive una vez y también realizó unos films policíacos de gran interés, caso de La mujer del cuadro, Perversidad, Los sobornados o Deseos humanos.
Más allá de la duda (1956), con Dana Andrews y Joan Fontaine, el último que hizo en EE.UU., se encuadra dentro de este segundo apartado aunque no fuera de los más logrados, pero al menos era interesante.
En él se trataba de denunciar la debilidad y los fallos del sistema judicial americano a través de un periodista que se inculpaba de un crimen para demostrarlo.
En esta ocasión, en el remake llevado a cabo por Peter Hyams, que tiene en su haber algunos títulos interesantes de este género como 'Los jueces de la ley' (1990) o 'Testigo accidental' (1990), de lo que se ocupa es de descubrir al corrupto fiscal del distrito Mark Hunter, que aspira a gobernador, que saca adelante los casos a base de poner pruebas falsas de ADN a última hora en colaboración con un policía.
Aquí el periodista televisivo C. J. Nichols se inculpa de un crimen que no ha cometido, pero filma en imágenes cómo fabrica las pruebas falsas para después demostrarlo en el juicio y salir en libertad, pero el fiscal Hunter es perro viejo y le dará la vuelta.
La ingenuidad y simpleza de la primera cinta es aquí actualizada con las nuevas técnicas y donde allí era un periodista aquí es un reportero televisivo con móviles y ordenadores en lugar de cartas o cabinas telefónicas.
En este caso se complica demasiado la trama, incluido un giro final para sorprender al espectador que resulta una vuelta de tuerca demasiado forzada.
En el insípido reparto destaca el breve trabajo de Michael Douglas, el más conocido del elenco artístico.
No obstante la película se ve con atención aunque el guión tenga algunas escenas un tanto convencionales que el artesanal Peter Hyams saca adelante con bastante ritmo, lo que hace que se siga la intriga con interés y cierto suspense, aunque finalmente no tenga la altura deseada.