Título: | HANNA | |
Tit. Orig.: |
HANNA | |
Nacionalidad: | EE.UU., 2010 | |
Dirección: | JOE WRIGHT | |
Guión: | SETH LOCHHEAD, DAVID FARR | |
Fotografía: | ALWIN H. KÜCHLER | |
Música | THE CHEMICAL BROTHERS | |
Interpretes: | SAOIRSE RONAN, ERIC BANA, TOM HOLLANDER, CATE BLANCHETT, OLIVIA WILLIAMS, JASON FLEMYNG, JESSICA BARDEN | |
Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 12 AÑOS | |
Duración: | 111 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
Joe Wright comenzó dirigiendo películas de época "Orgullo y prejuicio" (2005), "Expiación, más allá de la pasión" (2007)) pero cuando se estaba encasillando se fue al cine americano con "El solista" (2009) y para su cuarto largometraje se pasó al cine de acción con "Hanna".
Fue entonces cuando aceptó este difícil guión que durante tres años había estado rodando de mano en mano siendo ofrecido a directores como Danny Boyle o Alfonso Cuarón.
Tal vez la dificultad está en que mezcla el relato iniciático, el drama familiar, el thriller de espionaje, la ciencia ficción, el cuento de hadas, el videojuego de acción, ya que de todo tiene un poco, por lo que es complicado de clasificar.
Hanna es una chica de 16 años que ha sido criada en un bosque del norte de Finlandia, aislada de todo, entrenada por su padre, ex-agente de la CIA, para defenderse de Marissa Wiegler, una de sus dirigentes, que la quiere matar.
Ella tendrá que sobrevivir en un mundo que desconoce por completo, que no ha visto nunca un teléfono, un coche, la luz eléctrica, oído música o contemplado la televisión.
Hanna se convierte en un arma letal, de cara inocente e ingenua, capaz de cometer las acciones más brutales en defensa propia.
El género de acción intenta renovarse dándole el protagonismo a esta joven Nikita que lucha por sobrevivir y con ganas de disfrutar de ese mundo que acaba de conocer, como una Alicia en un país de maravillas, en el que ha hecho amistades, pero en el que también experimenta decepciones, en ese paso amargo de la infancia a la madurez.
Joe Wright había hecho films interesantes a cuyos guiones les supo sacar partido a la hora de la puesta en escena. Es un director con recursos, hábil, que elabora mucho sus cintas, pero aquí se encuentra con un guion con bastantes agujeros, muy convencional, difícil de creer, comenzando por su protagonista femenina.
Como eso no lo puede evitar, se dedica a cuidar la puesta en escena, a dar agilidad al producto, a obtener belleza de la fotografía, a cuidar al trío que forman Saoirse Ronan, Eric Bana y Cate Blanchett, que se ven metidos en unos personajes arquetipos.
Trata así de salvarlo en lo visual y estéticamente, haciendo un ejercicio de estilo, que en otras manos hubiera sido un fracaso total, pero no pasa de ahí.
La película está desequilibrada, en la que funcionan unas cosas sí y otras no, en la que falla la base, el elemental guión en el que se apoya, resultando fría, sin emoción, mecánica en las escenas de acción; tampoco el drama de Hanna llega a conmover y las reflexiones que se desprenden de la sociedad o las relaciones humanas logran que nos interesen.
Como dato curioso la parte en España es tópica y mal ambientada.
El resultado es un film distraído, para pasar el rato, si se entra en el entretenido juego.