Título: | LA PRIMA COSA BELLA | |
Tit. Orig.: |
LA PRIMA COSA BELLA | |
Nacionalidad: | ITALIA, 2010 | |
Dirección: | PAOLO VIRZÍ | |
Guión: | FRANCESCO BRUNI, PAOLO VIRZÍ, FRANCESCO PICCOLO | |
Fotografía: | NICOLA PECORINI | |
Música | CARLO VIRZÍ | |
Interpretes: | VALERIO MASTANDREA, STEFANIA SANDRELLI, MICAELA RAMAZZOTTI, FRABRIZIA SACCHI, CLAUDIA PANDOLFI, MARCO MESSERI, AURORA FRASCA, FRANCESCO RAPALINO | |
Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 7 AÑOS | |
Duración: | 111 MINUTOS |
---|
Por PACO CASADO
Los años dorados de la comedia italiana, que relevó al neorrealismo, que se llamó de teléfonos blancos y posteriormente la del realismo crítico, queda muy distante de la que se hace actualmente. Se echa en falta a los grandes maestros a los que las nuevas generaciones no han sabido ni siquiera imitar.
Actualmente de sus películas únicamente nos llegan algunas escogidas que suelen ser siempre las más comerciales, como es el caso de ésta que fue la de máxima recaudación del año 2010 y que Italia eligió para que le representara al Oscar a la mejor de habla no inglesa.
A nivel local fue galardonada con tres David de Donatello, al mejor guion y a los actores Valerio Mastandrea y Micaela Ramazzotti, esta última, por más señas, esposa de Paolo Virzì, que encargó la partitura musical del film a su hermano Carlo Virzì, con lo que queda una cinta muy familiar.
Precisamente de eso trata, de una familia rota, en cuyo guion ha vertido el director algunos apuntes autobiográficos y ha ambientado la narración en Livorno, en la región de la Toscana, donde vivió su infancia.
La historia se inicia en 1971 con la elección de una miss y la madre más guapa del verano, título este último que recae en Anna, ante el asombro de su esposo, el entusiasmo de su hija Valeria y la mirada adusta de su hijo Bruno. Poco después la vida disoluta de Anna y los celos del marido hará que la eche de casa con los dos niños que 30 años más tarde se convierten en los protagonistas de la segunda parte de este relato que habla de la vida misma, del amor, de la familia, de penas y alegrías, de errores y de aciertos, mientras buscan la felicidad o simplemente sobrevivir.
Anna es una madre inconsciente pero fuerte, que hace frente al futuro con decisión, muy unida a sus hijos, en los que influye poderosamente con su personalidad.
Es una película muy italiana, con personajes de una familia cualquiera que se enfrentan al amor, la vida diaria con sus problemas, sus misterios, sus momentos felices o dolorosos.
El argumento no está contado de forma lineal, sino que va constantemente del pasado al presente y ante la evolución y crecimiento de los personajes, con los consiguientes cambios de actores, se hace un tanto confuso en algunos momentos. Posiblemente se le haya dado esta forma de contar más moderna ya que de haberlo hecho por derecho sería un perfecto melodrama italiano, pero se haría más llevadero y comprensible.
En este sentido no estamos de acuerdo con el David de Donatello al guion, aunque no sabemos cual fue su competencia, sí en cambio con los dados a los dos actores Valerio Mastandrea en un papel muy serio y Micaela Ramazzotti que encarna a Anna de joven, mientras que ya de mayor lo hace una estupenda Stefania Sandrelli que le da mucho carácter a su personaje.
El director de "Napoleón y yo" regresa con este drama familiar, que realiza con altibajos, cuyo título extrae de una canción de Nicola di Bari, que se cierra con una redención melodramática, con algo de nostalgia y melancolía, con una mirada sobre las pequeñas miserias diarias y con un final previsible.