Título: | FOOTLOOSE | |
Tit. Orig.: |
FOOTLOOSE | |
Nacionalidad: | EE.UU., 2011 | |
Dirección: | CRAIG BREWER | |
Guión: | DEAN PITCHFORD, CRAIG BREWER | |
Fotografía: | AMY VINCENT | |
Música | DEBORAH LURIE | |
Interpretes: |
KENNY WORMALD, JULIANNE HOUGH, DENNIS QUAID, ZIAH COLON, RAY McKINNON, MILES TELLER, SER'DARIUS WILLIAM BLAIN, PATRICK JOHN FLUEGER, ANDIE MacDOWELL, ELIZABETH JONES |
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Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 7 AÑOS | |
Duración: | 114 MINUTOS |
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Por JOSÉ MONTESINOS
En estos tiempos que corren en los grandes estudios hollywoodienses prima más la rentabilidad del producto que encontrar buenas historias o arriesgarse con temas nuevos. Sólo hay que echarle un vistazo a las carteleras para encontrarlas llenas de remakes o continuaciones de cintas que han tenido el beneplácito del público.
Y precisamente tenemos que hablar de remakes con esta revisión de la película musical de 1984 “Footloose” y que veintisiete años después es revisionada por el mismo estudio que la creó.
Un joven que recientemente ha perdido a su madre abandona la gran ciudad para irse a vivir a casa de sus tíos en una pequeña población sureña.
La localidad posee unas rígidas normas de conducta para los más jóvenes del lugar y el chico, al desconocerlas, no hace más que meterse en problemas, intentando involucrarse con los de su edad pero decidido a la vez a cambiarlas.
De por medio se nos dan unas pinceladas de la relación, que no amorosa al principio, con la hija del reverendo del lugar y todo ello salpicado con un buen puñado de canciones y coreografías.
Con estos mimbres nos llega el que es cuarto largometraje del director Craig Brewer, no habiéndose estrenado el primero de ellos “The poor and hungry” (2000) y si habiéndolo hecho los siguientes aunque de una forma casi testimonial, “Hustle & Flow” (2005) y “Black snake moan” (2006).
Ahora se enfrenta a su película más comercial y para afrontar este remakes ofrece algunos cambios bien diferenciados con el anterior, a parte de actualizarlo a los años en que nos encontramos.
La dirección de Brewer conduce el largometraje por los derroteros habituales de los modernos musicales para adolescentes así que en este aspecto no podemos sorprendernos, utilizando una historia típica que no depara ninguna sorpresa y que sigue los pasos de producciones similares.
La historia posee importantes cambios con respecto a la original, que en este caso no sirven para mejorar un producto enfocado a una audiencia muy determinada, la cual sabe perfectamente lo que busca y eso es lo que le ofrecen.
Abundancia de canciones y numerosos bailes coreografiados, algunos con ciertas dosis de espectacularidad para una película interpretada por rostros jóvenes y desconocidos apoyados por algún secundario como Andie MacDowell y Dennis Quaid, quienes no aportan gran cosa.
Este nuevo “Footloose” a nuestro juzgar no mejora en absoluto al original que sí tuvo exito en las pantallas pero que tampoco era un film excesivamente convincente.