| Título: | JUAN DE LOS MUERTOS |  |
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Tit. Orig.: |
JUAN DE LOS MUERTOS | |
| Nacionalidad: | CUBA, ESPAÑA, 2011 | |
| Dirección: | ALEJANDRO BRUGUÉS |  |
| Guión: | ALEJANDRO BRUGUÉS | |
| Fotografía: | CARLES GUSI | |
| Música | JULIO DE LA ROSA | |
| Interpretes: |
ALEXIS DÍAZ VILLEGAS, JORGE MOLINA, ANDREA DURÓ, LUIS ALBERTO GARCÍA, BLANCA ROSA BLANCO, ELSA CAMP, ANDRO PERUGORRÍA, SUSANA PONS, ELIECER RAMÍREZ, ANTONIO DECHENT |
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| Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 12 AÑOS | |
| Duración: | 96 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
George A. Romero revivió el género de los zombies con "La noche de los muertos vivientes" (1968). Últimamente lo que se ha puesto de moda es la parodia, la sátira, la comedia negra, en torno al tema. A ello han contribuido títulos como "Zombies Party" (2004) y la serie de televisión "Walking Dead" que está tan de actualidad que el eco ha llegado hasta Cuba que, con esta coproducción independiente con España, rodada al margen del Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográfico, hace esta parodia.
El director cubano Alejandro Brugués, tras debutar en 2006 con una película que no se vio en España, hace con ésta la segunda, que es la primera que se rueda en la isla sobre el género.
Juan es un vago cuarentón que un día de pesca descubre un cadáver en el mar. Al regresar a tierra ve que se va convirtiendo en una plaga con miles de muertos vivientes por las calles.
El gobierno, ante su inoperancia, difunde por la TV que son disidentes mandados por el imperialismo americano, pero que todo está controlado.
Ante esta situación Juan ve la oportunidad de lucrarse de la crisis epidémica contrarrevolucionaria y de convertirse en el héroe que siempre soñó, creando una sociedad, con su amigo Lázaro, con el slogan "matamos a sus seres queridos".
El film es una comedia negra, una parodia política virulenta que critica el exilio, el régimen cubano, a veces de forma explícita, sobre el que hace la metáfora de ser un muerto viviente, cuyos habitantes ya no creen en las mentiras de un Fidel Castro infectado, y pone en tela de juicio que la momificada revolución ya no funciona, ante lo que surge un fuerte deseo reformista.
Refleja la situación cubana actual con un componente de humor negro, rodada en circunstancias difíciles y con pocos medios.
En este sentido el guion tiene una lectura política clara amparada en la risa, a base de rodar cabezas de zombies que son metáforas andantes, con mucha hemoglobina cómica y gags logrados.
Tras 50 años de revolución comunista llega esta otra de muertos vivientes que se convierte en epidemia ante la quietud de las autoridades que siempre tienen a quien echar las culpas de todo.
La trama está alargada y aunque podía haber llegado más lejos, se hace reiterativa abusando del tono desenfadado.
Brugués conoce bien el género y toma su lado más divertido para componer un producto extravagante con estos grotescos perdedores que actúan con picardía y gamberrismo en situaciones groseras.
La productora sevillana La Zanfoña, aporta entre otras cosas a Andrea Duró y sobre todo el excelente personaje que hace en su breve cometido Antonio Dechent, de lo mejor de toda la cinta. 
