Título: | SILENCIO DE HIELO | |
Tit. Orig.: |
DAS LETZTE SCHWEIGEN | |
Nacionalidad: | ALEMANIA, 2010 | |
Dirección: | BARAN BO ODAR | |
Guión: |
BARAN BO ODAR, ALEX ROSS, RICHARD SHAKOCIUS. Basados en la novela escrita por JAN COSTIN WAGNER |
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Fotografía: |
NIKOLAUS SUMMERER |
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Música |
MICHAEL KAMM, KRIS STEININGER |
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Interpretes: |
ULRICH THOMSEN, WOTAN WILKE MÖRNING, KATRIN SAB, BURGHART KLAUBNER, SEBASTIAN BLOMBERG, KAROLINE EICHHORN, ROELAND WIESNEKKER |
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Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 16 AÑOS | |
Duración: | 113 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
Baran bo Odar es un joven realizador, nacido en 1978 en Suiza, pero afincado en Alemania, estudió cine en la escuela de Munich y donde ha hecho su breve filmografía hasta ahora. Comenzó dirigiendo el corto 'Quietsch' (2005), debutó en el largometraje con 'Unter der Sonne' (2006), no vistos en España, y le conocemos a través de su segundo largo, 'Silencio de hielo' (2010), que se estrena en nuestro país con dos años de retraso, pero no por ello deja de ser interesante, tras pasar por los festivales de Palm Springs, donde ganó el premio al mejor director, Nuremberg y Las Palmas y ser muy considerado por los críticos alemanes que lo nominaron para la mejor película y Katrin Sab como mejor actriz.
Una joven llamada Pia fue violada y asesinada el 8 de julio de 1986 y su caso quedó sin resolver, sin encontrarse al asesino que no pagó su culpa. 23 años después, justo en la misma fecha, de nuevo se repite el asesinato y violación de otra joven de 13 años, Sinikka, y el policía Krischan Mittich, ya jubilado, que lo investigó, se pone de nuevo en marcha para resolver el caso y hacer justicia, porque cree que debe haber una conexión entre ambos crímenes. Le ayuda su colega David Jahn, atormentado por la reciente muerte de su esposa.
En este film hay una interesante combinación de thriller y melodrama, ya que los casos de asesinatos además de ser la excusa para llevar a cabo la investigación, también se atiende al drama de los personajes que se vieron implicados en los mismos, el estado emocional de la madre de la primera, los angustiados padres de la segunda, del policía con su mujer recién fallecida, así como del amigo que acompañó al primer asesino que le remuerde la conciencia y piensa que ha vuelto a cometer un nuevo crimen cuyas circunstancias similares así le hacen creer.
La cinta tiene un guion, basado en el best-seller del autor alemán Jan Costin Wagner que trata de unos casos como los que se han dado recientemente, de crímenes o desapariciones de niñas cuyos cuerpos no han aparecido, con la consiguiente angustia de la familia, que enjareta bien las situaciones y avanza con emoción en el descubrimiento de las pruebas y el análisis de los personajes.
A ello contribuye la correcta interpretación de los actores que, aunque no sean muy conocidos por estos parajes, denotan ser buenos en su trabajo a juzgar por las actuaciones que hacen de sus respectivos personajes en esta película expresando los sentimientos de desesperación en unos casos y de estados emocionales o de ánimo como la culpa en otros.
Bien dirigida con una interesante puesta en escena, a pesar de que los casos están distanciados en el tiempo, aunque los personajes sean los mismos, con una narración poderosa, que reflexiona sobre la pederastia, la culpabilidad, la perversión, el fracaso en la investigación y la posible redención, que hace creíble lo que nos cuenta, que no parece de un director novato por el buen pulso que da a la narración y a la eficaz planificación que plantea.
El film posee una brillante fotografía de Nikolaus Summerer.