Título: | TO THE WONDER | |
Tit. Orig.: |
TO THE WONDER | |
Nacionalidad: | EE.UU., 2012 | |
Dirección: | TERRENCE MALICK | |
Guión: |
TERRENCE MALICK |
|
Fotografía: |
EMMANUEL LUBEZKI |
|
Música |
HANAN TOWNSHEND |
|
Interpretes: |
BEN AFFLECK, OLGA KURYLENKO, JAVIER BARDEM, RACHEL McADAMS, JEFF ANDERSON, CASEY WILLIAMS, TATIANA CHILINE, ROMINA MONDELLO, CHARLES BAKER |
|
Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 7 AÑOS | |
Duración: | 112 MINUTOS |
---|
Por PACO CASADO
Hay un refrán que dice "Cría fama y échate a dormir" y eso creemos que le ha pasado a Terrence Malick, quien comenzó con la estupenda 'Malas tierras' (1973), siguió con la maravillosa 'Días del cielo' (1978) y terminó de encandilar a la crítica con 'La delgada línea roja' (1998).
Como se ve sus producciones se distanciaban bastantes años y estaban muy cuidadas siendo cada vez más interesantes.
Los críticos quisieron ver en él a un director de culto, que no se prodigaba hasta encontrar una nueva idea, pero a partir de ahí con 'El nuevo mundo' (2005) comenzó su declive y con 'El árbol de la vida' (2011) empezó a hacer películas con más frecuencia y a dividir a algunos críticos y sobre todo al público.
Con 'To the wonder' (2012) ha llegado a la cima de la nadería, de no decir nada. Se nos ocurrió durante la proyección que en vez de hacer una crítica de este film, sería más interesante apuntar en un papel las impresiones que nos producía, pero no teníamos los elementos necesarios a mano.
Según hemos podido leer su argumento es algo así: Neil, un frustrado escritor, que trabaja como inspector de medioambiente, y Marina, una joven madre ucraniana divorciada, con una hija de 10 años, Tatiana, son felices juntos. Él cree haber encontrado a la mujer de su vida, pero cuando más adelante su relación se agrieta, otra mujer, Jane, aparece en su vida.
Esperemos que esta especie de sinopsis ayude a comprender lo que se nos quiere decir sobre el amor, el desamor y las dudas sobre la fe, con el aspecto de un spot publicitario y con escenas inconexas. Ha querido repetir la fórmula de 'El árbol de la vida', pero esta vez no le ha funcionado.
Poco o nada se atisba en sus imágenes por las que deambulan Ben Affleck, Olga Kurylenko, en un principio y Rachel McAdams después, sin saber a qué están jugando, con cara de palo a veces, bailando, riendo o discutiendo sin que el espectador sepa qué está ocurriendo, todo ello casi sin palabras, mezclado con bellas imágenes de la naturaleza (qué buen documentalista ecológico desaprovechado hay en Malick cuya cámara se extasia con una avispa en el cristal de una ventana, en la belleza de una flor o un paisaje), con constantes pensamientos puestos en voz en off de los personajes, entre ellos el de Javier Bardem, que hace de un sacerdote católico, el Padre Quintana, que pregona con gran entusiasmo la fe en Cristo, pero con dudas de su vocación, que en cierto momento le dice a Marina que de cara a la Iglesia ella sigue casada con el padre de su hija y sin embargo, tras contraer matrimonio civil con Neil la vuelve a casar por la Iglesia.
No entendemos nada en este ejercicio vacío, pretencioso en sus reflexiones, en su poesía de versos fáciles e imposibles.
Un drama existencial sobre lo efímero del amor, el fracaso en las relaciones sentimentales que ganó el Premio Signis de la Asociación Católica Mundial para la Comunicación en la Mostra de cine de Venecia 2012.
Film de propaganda cristiana evidente que indudablemente llega mal el mensaje a los espectadores, ya que con cintas como ésta la asistencia es negativa, puesto que ni emociona, ni sorprende, solo para los fans de Malick y críticos defensores a ultranza del cine de autor, de su cine y hasta éstos parecen ya dudar de Malick al ser tan pretencioso, con su falsa poesía, llena de frases como fondo de una sinfonía de música e imágenes.
La música, bastante inspirada en muchos momentos de Hanan Townshend, junto con algunos temas clásicos, se erigen en protagonista ante el vacío intranscendente de las imágenes que ilustran, realzadas por la majestuosidad de la cámara.
Es una pena que un director de su talento haga un guion tan pobre envuelto en un look de lujo y obligue a los actores a unas interpretaciones muertas ya que deambulan como zombies por la pantalla.