Título: | PERSIGUIENDO MAVERICKS | |
Tit. Orig.: |
CHASING MAVERICKS | |
Nacionalidad: | EE.UU., 2012 | |
Dirección: | MICHAEL APTED, CURTIS HANSON | |
Guión: |
KARIO SALEM. Argumento: JIM MEENAGHAN, BRANDON HOOPER |
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Fotografía: |
BILL POPE |
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Música |
CHAD FISCHER |
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Interpretes: |
GERARD BUTLER, ELISABETH SHUE, ABIGAIL SPENCER, JOHNNY WESTON, TAYLOR HANDLEY, LEVEN RAMBIN, DEVIN CRITTENDEN, JENNICA BERGERE |
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Censura: | AUTORIZADA PARA TODOS LOS PÚBLICOS | |
Duración: | 111 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
No es la primera vez que el cine americano hace una película sobre el surf, pero no es frecuente que dos directores de la talla de Michael Apted y Curtis Hanson se unan para dirigir un mismo film. El motivo no fue otro que Curtis Hanson abandonó el rodaje a tres semanas de terminar debido a una operación y tuvo que tomar el mando el británico Michael Apted para acabarlo.
En este caso lo que cuentan es la historia real de Jay Moriarty un joven surfista de Santa Cruz (California), que llegaría a ser uno de los más famosos de la historia, que desde los 15 años quiso dedicarse a ello, para lo que contó con el entrenamiento de Frosty Hesson, toda una leyenda del surf, uno de los cuatro hombres vivos que lo lograron y así conseguir el sueño de vencer los "mavericks", o lo que es lo mismo, unas olas gigantescas que tan solo dominan los mejores y que incluso puedes morir en el intento, como de hecho le ocurrió al protagonista, que falleció demasiado pronto, a los 22 años, durante el rodaje de un spot publicitario en las Maldivas, aunque entre tanto logró fama mundial.
Mientras lo intentan surge entre ellos una gran amistad que transforma de alguna manera sus propias vidas, e influyó en sus vecinos el espíritu Jay, su forma de vida y afrontar el futuro.
Por parte de Frosty encuentra a un hijo (él tiene dos hijas pequeñas) y por el lado de Jay al padre ausente ya que le abandonó al igual que a su madre.
La cinta no solo recoge los entrenamientos de ambos para conseguirlo, sino también las relaciones dramáticas de las familias de ambos, las de Jay con su novia y con su madre o de Frosty con su mujer y sus pequeñas.
Estas relaciones se trasladaron también a los propios actores protagonistas, ya que Jonny Weston debuta en el arte de la interpretación junto a la veteranía de Gerard Butler que le enseñó bastante en este sentido al novato actor.
Un guion en exceso elemental, aunque con algunos valores como el afán de superación, que se podía haber elaborado algo más y se hubiera obtenido un mejor resultado.
Los actores tratan de sacar adelante algo que no tiene mucha vida en realidad, intentando convertir en héroes a simples deportistas.
La fotografía capta esos fenómenos de la naturaleza con gran espectacularidad y belleza, aunque también es verdad que en cierto modo se abusa de ello, lo que puede que no interese a los espectadores que no sean aficionados a este peligroso deporte.