Título: | DOMINGO SANGRIENTO | |
Tit. Orig.: |
BLOODY SUNDAY | |
Nacionalidad: | INGLATERRA, IRLANDA, 2001 | |
Dirección: | PAUL GREENGRASS | |
Guión: |
PAUL GREENGRASS |
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Fotografía: |
IVAN STRASBURG |
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Música |
DOMINIC MULDOON |
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Interpretes: |
JAMES NESBITT, TIM PIGOTT-SMITH, NICHOLAS FARRELL, GERARD McSORLEY, KATHY KIERA CLARKE, DECLAN DUDDY, MIKE EDWARDS |
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Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 13 AÑOS | |
Duración: | 108 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
El realizador de 'Extraña petición' (1998) lo encontramos ahora convertido en un documentalista que narra, con gran profusión, los tristes sucesos del 30 de enero de 1972, día en el que una manifestación, no autorizada, organizada por la Asociación pro Derechos Civiles, contra un decreto del gobierno de Londres que autorizaba los encarcelamientos preventivos, sin necesidad de un juicio previo, fue rechazada por el ejército británico a tiros, muriendo trece ciudadanos inocentes y catorce resultaron heridos. Aún no se han aclarado los hechos ni se ha castigado a los culpables.
Paul Greengrass elige a cuatro personajes reales, claves para seguir esta historia de las 24 horas de aquel fatídico domingo: Ivan Cooper, líder de los defensores de los derechos civiles y miembro del Parlamento; Gerry Donaghy un rebelde católico de diecisiete años cuyo tío fue el primero en caer; el general de brigada Patrick MacLellan, que fue quien dio la orden, y un operador de radio que hizo más de la mitad de los disparos.
Estos hechos inspiraron una de las mejores canciones del grupo U2 de igual título y que se incluye como única música de la película a su término durante los títulos de crédito finales.
Este triste suceso en el que se enfrentaron diez mil manifestantes contra tres mil soldados, no hizo más que recrudecer la violencia en Irlanda del Norte y ganar adeptos a la causa del IRA, iniciando así tres década de terrorismo.
El film está narrado con un tono semidocumental, periodístico, con algunas pinceladas de ficción dramática, aunque ya de por sí lo fueron bastante los hechos que cuenta, con imágenes de angustia, disparos, carreras, confusión y caos.
La idea era contar lo que sucedió ese día de la forma más auténtica posible para que no se olvide en una verdadera lección de historia.
El tono documental hace que se abuse de la cámara a mano con crispadas imágenes en un montaje excesivamente corto y rápido que a veces perjudica la visión de lo que sucede.
Se mezclan unos cuantos actores profesionales o amateur con gente del pueblo para darle más realismo.
Esta honesta cinta de denuncia logró el Oso de Oro en Berlín 2002, compartido con 'El viaje de Chihiro' (2002), el Premio a la mejor película en el Festival de Sundance y así hasta once premios internacionales.