| Título: | SIN CONTROL |  |
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Tit. Orig.: |
DERAILED | |
| Nacionalidad: | EE.UU., 2005 | |
| Dirección: | MIKAEL HAFSTRÖM |  |
| Guión: |
STUART BEATTIE |
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| Fotografía: |
PETER BIZIOU |
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| Música |
EDWARD SHEARMUR |
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| Interpretes: |
CLIVE OWEN, JENNIFER ANISTON, MELISSA GEORGE, VINCENT CASSEL, SANDRA BEE, TOM CONTI, WILLIAM ARMSTRONG, RACHEL BLAKE, RZA, XZIBIT, ADDISON TOMLIN, GIANCARLO ESPOSITO |
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| Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 18 AÑOS | |
| Duración: |
105 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
Como es ancestral costumbre del cine americano, a raíz de ser nominada al Oscar a la película de habla no inglesa de 2004, 'Evil' (Ondskan), el sueco Mikael Häfstrom ha sido contratado para dirigir este thriller psicológico de carácter sexual en los que el motivo principal suele ser la infidelidad matrimonial que como es habitual acaba pagándose.
Esto no es más que otra fórmula de defensa de la familia que tiene metida entre ceja y ceja el cine americano.
En esta ocasión la historia se basa en el best seller de James Seigel en el que Charles Schine, un ejecutivo de una empresa de publicidad cae en la trampa de Lucinda Harris, una mujer ingenua y atractiva, cuando un día se conocen en el tren camino de sus respectivos trabajos.
Ambos están casados y él tiene una hija enferma.
Tras surgir la pasión son víctimas de un vil chantaje criminal por un indeseable, La Roche, que cada vez le pide más dinero por no contárselo a su esposa y no quieren dar parte a la policía para que no lo sepan los respectivos cónyuges.
Esta infidelidad termina convirtiéndose en una auténtica pesadilla para Charles.
El argumento da un giro inesperado a mitad de la trama y lo que antes era un drama familiar ahora se convierte en un film policiaco en el que el protagonista tratará de descubrir lo que hay detrás de todo esto y poner al criminal entre rejas.
El guion, bien escrito, usa los trucos habituales del género de forma habilidosa, aunque contenga algunas situaciones algo convencionales que si se analizan a fondo tal vez hagan caer el castillo de naipes, pero sin son aceptadas y el espectador se deja llevar, logra que le entretenga.
Esta historia sirve también para que Jennifer Aniston demuestre que es capaz de otros registros que los de la comedia, bien seguida por Clive Owen y el francés Vincent Cassel.
Mikael Hafström ha captado rápidamente el modo de hacer del cine americano con una mayor disponibilidad de presupuesto y logra un buen acabado formal, con una factura impecable y una notable banda sonora.
