Título: | JAPPELOUP (DE PADRE A HIJO) | |
Tit. Orig.: |
JAPPELOUP | |
Nacionalidad: | FRANCIA, CANADÁ, 2013 | |
Dirección: | CHRISTIAN DUGUAY | |
Guión: |
GUILLAUME CANET. Basado libremente en la novela "CRIN NOIR", escrita por KARINE DEVILDER |
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Fotografía: |
RONALD PLANTE |
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Música |
CLINTON SHORTER |
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Interpretes: |
GUILLAUME CANET, MARINA HANDS, DANIEL AUTEUIL, LOU DE LAAGE, TCHEKY KARYO, DONALD SUTHERLAND, MARIE BUNEL, JACQUES HIGELIN, ARNAUD HENRIET |
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Censura: | NO RECOMENDADA PARA MENORES DE 7 AÑOS | |
Duración: |
130 MINUTOS |
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Por PACO CASADO
Tras pasar por el Festival de Montreal 2013 llega a las pantallas españolas este biopic en torno a Pierre Durand, un hombre que su vocación por los caballos le llevó a dejar su prometedora carrera de abogado para dedicarse al deporte hípico de salto de obstáculos, además de por complacer a su padre.
Es una película en la que se pone de relieve lo que es una vocación, un empeño en superarse cada día, a base de sacrificio y esfuerzo para llegar a los más alto, ya que de hecho consiguió la medalla de oro en los campeonatos olímpicos de Seúl celebrados en septiembre de 1988.
El film cuenta desde el comienzo el nacimiento de este bello caballo, pequeño, de brillante pelo negro, al que llaman Jappeloup, en quien pocos confían, pero Durand pone su fe y esperanza en él hasta llegar a ser campeón del mundo en su especialidad convirtiéndose en una leyenda olímpica.
Como cualquier ser humano hay momentos de debilidad, de desilusión cuando en más de una ocasión se tuvo que retirar de una competición por cometer faltas o ser descalificado e incluso estuvo a punto de vender su caballo a los americanos que le ofrecieron 400.000 dólares por él, pero el análisis de sangre dio que tenía Piroplasmosis y eso echó para atrás al comprador, algo con lo que podía convivir perfectamente hasta el punto, como demostró, de llegar a ser campeón, sin problemas.
Uno de los elementos que resalta la cinta es la conversación que tiene Pierre con Serge, su padre, e igualmente con Raphaélle la chica que vio nacer al caballo y a la que contrató para que lo cuidara como moza de cuadras, ya que formaba parte de su vida, en cuya conversación le hace caer en la cuenta de que "sabes de medallas, pero no de caballos, porque no estás ni un minuto con él". Ella se identifica con él, lo quiere y los mima y eso lo agradece el animal e incluso le obedece mejor que a su dueño.
Otro de los elementos es el de su esposa Nadia que es una buena amazona que deja su afición por amor a su marido y se sacrifica por él.
Junto a esas virtudes humanas bien expuestas en el guion que lleva a cabo el propio actor protagonista Guillaume Canet, basado en el libro 'Crin noir', de Karine Devilder, basado en hechos reales, en el que se refleja algunos pasajes que no sucedieron así, está el hecho de querer abarcar demasiado, de abusar de excesivos campeonatos y competiciones a los que se presenta lo que puede cansar un poco a quienes no sean aficionados a los animales, a los caballos y a estas celebraciones hípicas.
Tal vez acortando un poco el metraje se haría más llevadero y no perdería el ritmo en algunos momentos.
No obstante la dirección del canadiense Christian Duguay saca bellos momentos del animal en el entrenamiento y en los saltos en los concursos en los que se recorre con la cámara medio mundo, ilustrado con una bella banda sonora y canciones de los 80. Paralelamente transcurre la vida privada del protagonista, en esa hermosa relación entre padre e hijo.
Muy bien el trabajo actoral tanto de Guillaume Canet, como del excelente Daniel Auteuil, así como Lou de Laäge en el papel de la joven Raphaélle.
La película ha sido un gran éxito de taquilla en Francia con más de dos millones de espectadores.